La decisión de qué material usar para los falsos techos depende principalmente de los gustos personales y del presupuesto con el que se cuenta. Pladur y escayola son dos de los materiales más comunes para los falsos techos, cada uno con sus propias características y ventajas.

Pladur es un material compuesto de yeso y fibra de vidrio. Se caracteriza por su resistencia al fuego, su facilidad de instalación y su bajo coste. Además, es ligeramente más liviano que la escayola, lo que lo hace ideal para techos con poca carga. Para instalar pladur, se necesitan herramientas como una sierra de mano, una sierra de calar, una regla, un martillo y una escuadra.

En cuanto a la escayola, es un material compuesto de yeso, arena y arcilla. Esto lo hace muy resistente a la humedad, lo que lo hace ideal para techos en áreas con alto nivel de humedad. Además, es un material duradero y, si se instala correctamente, puede durar más de veinte años sin necesidad de reparaciones. Para instalar escayola, se necesitan herramientas como una sierra de mano, una sierra de calar, una paleta, una regla, un nivel, un martillo y una escuadra.

Ambos materiales tienen sus propias ventajas y desventajas. El Pladur es más barato, más fácil de instalar y más ligero, pero no es tan resistente como la escayola. Por otra parte, la escayola es más resistente y duradera, pero es más cara y requiere de una instalación más compleja.

En última instancia, la decisión de qué material usar para los falsos techos depende de los gustos personales y del presupuesto con el que se cuenta. Si se necesita un material resistente y duradero, la escayola es la mejor opción. Si el presupuesto es limitado, el Pladur puede ser una buena opción. Sea cual sea la elección, se necesitan herramientas como una sierra de mano, una sierra de calar, una regla, un martillo y una escuadra para instalar cualquiera de los dos materiales.